A partir de mañana míercoles 30 y hasta Navidad, vamos a estar tocando yo y el corito buen royo a partir de las 9 y media en el Rincón de la zona (Antiguo Cubanía). Personal y a guitarra limpia. Los espero.

Bueno chicos esto se calienta así que mientras el disco sale definitivamente en Enero, manténganse al tanto en mi web: www.marelalemany.com No duden en dejar sus sugerencias y comentarios.

Este es el primer single del CD que sale el 20 de Enero. Se llama NADA y está comenzando a sonar en las emisoras del país. Please, si les gusta, llamen y llamen y más llamen, pa que la pongan mucho y así mucha más gente pueda oir lo que viene. Espero que les guste.
NADA

Peter se encargó de documentar parte del proceso que hoy ya está en su fase final. Faltan algunas fotos que iré posteando a lo largo de la semana. La verdad es que hacer lo que uno quiere y trabajar con gente a la que uno aprecia no tiene precio. Gracias a todos los que están involucrados en este proceso.

Decisión: Retomar el blog.
Razón del abandono: Demasiadas cosas en mi cabeza.
Razón real del abandono: Descuido, dejadez.
Meta: Escribir por lo menos una vez a la semana.
Razón de esta decisión: Tozudez.

Debo decir que el hecho de que muchos de mis amigos hayan dejado de hacer lo mismo, los recientes cambios en el censo de la ciudad (Con varias pérdidas importante que se fueron para los países), y EL DISCO EL DISCO EL DISCO, han sido también causantes del estado de deterioro de este blog. No more.

Una postal de fotos virtuales en un día en el que no he pegado ojo en la ciudad con la furia escondida. Vivo bonificado al tiempo ahora. Soy un transeunte en un espacio cada vez más frecuente, más calido y más propenso para todo. Ahora puedo postear el cuaderno de bitácora visual de este viaje que no acaba.

(Este post lo hice la semana pasada mientras aun estaba es BS, pero me tomó un tiempecito hacer el gif.)

Entre hoy y mañana termino de grabar las voces del disco. Ya pronto pienso sacar la primera canción a la radio. Mi voz está frágil y me cuerpo está a punto de caerse por zonas como si lo hubieran cortado. Pero la actividad es adictiva y sólo me arrepiento de no poder compartir con mis amigos lo suficiente. Utopía no. 7: el tiempo. El sábado me voy a Argentina a ver a mi hermano querido, su mujer muy embarazada y la beba más bella que no he podido ver crecer. Antes, picoteo, como para estresar un poquito las cosas. Cumpleaños de Wendy y despedida de Emyris espero. Picoteo = Viernes 9, en el nuevo HILTON de malecón center. 10:00 P.M. GRATIS. En plan Casa de Teatro. Recuento no. 2 de este blog sin fecha. PAUSA.

Esta consigna puede sonar muy europea… y es verdad aquí hace un calor del diablo, la gente maneja como loca, la polución es insoportable y no, no creo que muchos de nosotros vayamos a dejar nuestro carro con aire acondicionado por un pequeño aparato de dos ruedas. Pero es aquí donde es realmente coherente tener un carril de bicicleta. Y no piensen en nosotros. Piensen en los cientos de miles de personas que tienen que transportarse en carro público todos los días. Ellos ya pasan suficiente calor y pierden el suficiente tiempo como para que la opción de ir seguros por un carril en su propio vehículo no suene tan descabellada. Si tan sólo un cuarto de esas personas decidieran cambiar su rutina conchística por esa de las ruedas delgadas entonces imagínense el cambio: habría que reducir los carros públicos, lo que nos ahorraría combustible, polución y agilizaría el tránsito, por no hablar de la reducción de stress en los demás conductores; mejoraría el paisaje urbano y la ciudad se convertiría en un ejemplo de desarrollo para los demás países latinoamericanos. Quien sabe, a lo mejor a algunos de nosotros nos da con coger la bici para ir al trabajo de vez en cuando (cuando nuestra doble moral se ajuste a nuestra realidad y nos demos cuenta de que no es normal que haya que ir con saco y corbata a los trabajos). El caso es que si, esto es una utopía, pero es una utopía que bien podría ser impulsada por políticas de un ayuntamiento con visión. Lo único que hace falta es un poco de planificación que es lo que hace falta en general en este país. Pero para que el Ayuntamiento quiera hacer algo tiene que sentir la presión de la gente y ahí es donde entramos nosotros. Si sigo pidiendo por esta boquita, pues que bonito sería que además de esto, se soluciones el problema de la luz y podamos tener un tranvía que acompañe al carril bici, y nos empezamos a bajar de los carros y nos empezamos a librar de la esclavitud a la que nos han sometido las grandes compañías petroleras. UNA BICI MÁS, UNA JEEPETA Y UN CONCHO MENOS. Mi utopía, algún día.

El barrio en el que me gustaría vivir es un barrio sencillo, sin muchas casas lujosas, ni torres de muchos pisos. Yo quiero vivir en un barrio donde pueda caminar para ir a comprar las cosas del día a día. Hablar con la panadera y preguntarle al carnicero si le gustó el partido de la noche anterior. Si es posible me encantaría que los dos fueran de países distintos para que me cuenten historias de cómo conocieron a su mujer y cual es la receta de ese pan tan rico que hasta ese momento yo no conocía. Me encantaría que hubiera un parque o una plaza cerca para sentarme a coger el sol y quedar con mis amigos para ir a comer a un sitio nuevo que es del primo de la muchacha que trabaja en casa de un amigo. No importa mucho el ruido, si no es de los carros y si no es de un vecino que decidió que no era suficiente con los 500 Watts de potencia y que era mejor si dejaba sordo al barrio completo. Si el ruido es el ruido ocasional de la gente paseando y hablando todos esos idiomas, o del radio ocasional de la ama de casa, pues no me importa mucho el ruido. Si hay un mercado cerca mejor. Si puedo ir los domingos a las pulgas a encontrar de todo a un buen precio, compartiendo además un poco de la historia que ya alguien vivió, mejor, si no tengo que ir en carro, mejor. Me encantaría detenerme a ver las obras de esos artistas que decidieron que la pared de un lugar necesitaba un poco de color y la pintaron a su particular manera. Con un poco de luz, mejor. Con agua y sin cables y basura por la calle, mejor. Sin policías corruptos y extorsionadores, mejor. Me encantaría de verdad, vivir en un lugar así y no tener que viajar muy lejos para encontrarlo. Si tan sólo hubiera más gente que quisiera lo mismo, y nos mudáramos de los Arroyo Hondo, los Piantini, los Naco, los Bella Vista y demás y nos mudáramos con nuestras chancletas y bicicletas a la zona y nos comprometiéramos a verla cambiar para bien… quien sabe lo que sería de mi utopía.

Tengo mucho que no escribo. He estado organizando mis pensamientos. Reseteando la vieja máquina humana; evaluando cambios a la vez que sigo mi trabajo y me dedico a terminar el disco que ya casi está listo. En fin subido en una montaña rusa… creo que es la mejor manera de describirlo.

He estado pensando mucho últimamente en las cosas a las que le damos prioridad y aquellas que dejamos de lado o ignoramos simplemente porque nos hemos acostumbrado a ellas. Nuestras preocupaciones suelen ser preocupaciones de trabajo, preocupaciones materiales y sentimentales. Vivimos inmersos en nuestro pequeño mundo individual y terminamos haciendo las cosas que satisfacen al pequeño cuerpecito que nos acompaña. “Me apetece hacer, comer, vestir, esto” “ Tengo que trabajar para, acumular riqueza para poder hacer, comer, vestir, esto o poder cumplir cualquier proyecto personal que tenga en mente”. Hace mucho que no pensamos que “no es normal que yo pueda gastarme la mitad de lo que gana la muchacha de mi casa en una comida en un restaurante de la capital”, y que aún así “no vivo como un rey, me cuesta llegar a fin de mes y no tengo seguridad alguna de que en 40 años cuando ya no pueda o no quiera trabajar más voy a tener dónde caerme muerto”. ¿Culpa de quién? Siempre es mejor no hacerse esas preguntas porque lo único que terminan haciendo es distraernos de nuestro objetivo principal: “Pasarlo cada vez mejor, tener cada vez mejores cosas, y lograr acumular más éxitos personales”.

No me voy a quejar. Yo voy a seguir con este plan individualista mío, pero en el proceso me voy a desahogar con utopías que me llenan la mente, y que como los sueños carecen de estructuras claras, pero que a mi juicio serían una buena base para empezar a organizar esta isla y este mundo que nos rodea. A lo mejor a alguien se le prende un bombillo y empezamos a pensar todos que es posible pensar también en el futuro no desde un punto de vista personal exclusivamente, sino desde el punto de vista de que si no hacemos nada por mejorar lo que nos rodea, estamos quedándonos a merced de toda la gente que entendió que la política era un medio para hacerse ricos y tener jeepetas y se olvidó de que lo esencial era ayudar a sentar las bases de una sociedad más justa, más diversa y más preparada.

Mañana más.

Es imposible que logre describir la descarga de buen rollo que hubo en Da Franco el sábado. Las fuerzas de la naturaleza se aliaron para que todo se diera como se tenía que dar y yo disfruté como un niño. Entre velas y buenos amigos quedó uno de los mejores conciertos que he dado hasta ahora. Gracias a todos los que fueron y gracias a: Janio por sus canciones y su energía; a Janio Mikes por ser el más papi chulo; a Manolo por su alegría y su virtuosismo; a Ely por ser un monstruo; A Karel por ser siempre músico y amigo; a María por sus caritas llenas de sentimientos; a Altair por las fotos; Gracias de verdad…

Siento no tener fotos, pero el ensayo de esta noche ha sido impresionante... porque donde sobra corazón no hacen falta muchas más cosas, y eso es lo que espero que llevemos el sábado a Da Franco. No quiero desvelar el repertorio, ni los amigos que van a estar conmigo este sábado, pero la cosa promete. Y cuando yo digo que promete, no me refiero a que va a sonar cool, o a que va a ser el concierto mejor preparado de la historia; lo digo porque va a sobrar el buen rollo, las sorpresas, la sensibilidad... eso o voy a tener que comenzar a hacer conciertos en mi casa! Bueno, les dejo un videito de Leo Pimentel, que ha sido el acordeonista de Nada en el disco. Me lo mandó Peter y estoy emocionado. Un abrazo a todos.

Bueno, había prometido no tocar hasta que no estuviera el álbum lanzado! Pero me pidieron que asumiera el honor de relevar a Alex este sábado en Da Franco y no me pude negar. Así que como no había nada preparado, vamos a hacer un versión acústica y divertida de lo que viene por ahí... Algo parecido a lo que hacemos en mi casa pero con mejor sonido. Al que le guste la espontaneidad que no se lo pierda... al que le gusten los conciertos con mucha gente, baile y bandas encendías que se vaya al Natura. Yo estoy como animado y eso sólo promete!

La gente que te pasa por imprevisto es mágica dentro de todo este caos. Eso que conocemos, las canciones que hemos escuchado, lo que ahora nos deslumbra, está atado a alguien que un día decidió que quería compartirlo. ¿Quién te presentó a Jorge Drexler? ¿Quién te puso a Silvio la primera vez? Recientemente he estado conociendo algunos grupitos interesantes: Ben Folds Five (Gracias Alberto); Telepop (Gracias Manolo); Brazilian Girls (tks Nic); Phoenix (;cD Emyris)… y así la lista sigue hasta que mi mamá me cantaba La linda manito. La era de la información necesita del hombre y de su humanidad para no perder el sentido. Lo que nosotros decidimos hacer con la información nos define. Así que le preparé my own miz a Osmany y daré constancia de que en esto de la música seré siempre un novato, como una esponja chupando de lo nuevo.

Gracias a al Jefe de la Cuadra Técnica, el pupilo de Jack Veneno, el hombre que define la caridad, Mr. Osmany, por ponernos en esto.

VENGA A DAR SALTOS MORTALES

Es increible el desconocimiento que tenemos de todo lo que nos rodea y que tan bien estamos informados de todo lo que pasa en esos países verdes. Cómo nos preocupamos de la pobreza en Africa, de las injusticias en Irak, o de los conflictos en Israel y no somos capaces de entender porqué vivimos donde vivimos ni cómo vivimos ni con quien vivimos. No es un reproche, es más bien una autocrítica. Es bonito soñar con futuras generaciones o escribir del amor y es necesario, pero no es bueno estar ciego. Acabo de ver un documental sobre la vida de Jean Leopold Dominique, un agrónomo haitiano que dedicó su vida a la lucha por los derechos humanos y la libertad en Haití a través de su emisora Radio Haití Inter. El documental se llama “The Agronomist” y yo lo encontré en movie max. Pero más allá del desconocimiento que tenemos de la lucha de nuestros vecinos o de su realidad lo que me preocupa son las similitudes que sus carencias tienen con las nuestras. Nosotros somos la fiera domada, ellos son ese país incontrolable del Caribe, pero la pobreza es la misma aquí y allá, y aunque varían los millones de personas, la injusticia es igual. Y muchos se apresurarán a matizar esta afirmación, pero muy pocos somos capaces de identificar exactamente donde radican los problemas de esta isla, porque hemos crecido metidos en una burbuja que se hace cada más vez gruesa por la globalización. Sabemos mucho más de música que de soluciones. Y no hablo de leer más los periódicos para enterarnos mejor de cual es el chisme político de moda. Ya sabemos que la educación es deficiente, y que los políticos son corruptos, y que la economía no se recupera, y etc. Hablo de comunicarnos con las demás personas que están en la calle. Con los que no tienen internet. Con los que de verdad la están pasando mal. Hablar con ellos, a ver que logramos entender. Somos definitivamente la generación de la información, pero somos también una de las generaciones dominicanas menos comprometidas y organizadas que ha existido en este país, aun cuando la tendencia mundial es hacia el compromiso y hacia la organización ciudadana en pos de lograr soluciones para esos problemas que los políticos simplemente no quieren o no tienen tiempo de analizar. La única manera en la que vamos a lograr cambios efectivos en nuestro país, es si logramos entender que es lo que más afecta a la generalidad de la población, no sólo a los sectores privilegiados donde hemos crecido; es si nos organizamos en grupos donde se debatan abiertamente estos temas, en donde simplemente se haga el ejercicio de estar involucrados con la sociedad. Puede que sea más fácil mirar para otro lado, pero entonces lo único que estaremos haciendo es mirar la vida con la certeza de que un día nos vamos a morir y punto, y los que vengan después que se jodan. Exactamente el mismo razonamiento que usan nuestros diputados más ilustres cuando deciden aprobar una Ley que desproteje las áreas naturales y arqueológicas más importantes de la región, o vender el contrato de una planta energética a una compañía extranjera por un precio absurdo. Nosotros debemos asumir el compromiso de que estamos aquí para hacer una diferencia y para que sea posible empezar a construir la base de una utopía de la que nos beneficiaremos todos. Yo personalmente voy a trazarme una primera meta y voy a intentar entender donde coño estamos fallando.

Si esto fuera gringolandia es muy posible que dentro de 20 años yo me decidiera a hacer una película sobre esta época de mi vida y de la vida de una generación bloguera. Así como una vaina como Generation X (Qué en realidad es un término muchísimo más acertado para esta generación...pero bueno ese es otro tema). El caso es que me quedé pensando en el recuerdo que me quedará de esta época. De llevarle la vida a todo el mundo; de hacer amigos que están en todo el mundo y que casualmente son de tu propia ciudad y janguean con la misma gente, pero nunca se habían conocido; De los post que nunca debieron haber sido; de los anónimos; De los boches antiblog/problog... En realidad pienso en ¿qué es lo que más recordaremos de esta época? Digo si viviéramos en gringolándia. Porque en los 60 y los 70 fueron los hippies y la generación políticamente comprometida; y en los 80 y los 90 fuimos perdiendo el interés por esas cosas y nos tacharon con una X; y en los 2000 pues supongo que no entendemos de política, pero entendemos de Internet y de celulares y cámaras digitales. Bregamos con Java, con HTML y Flash. Bajamos canciones de otros artistas en MP3 y escribimos un diario público multimedia llamado Blog. Realmente somos superiores, pero seguro que encontramos una manera de burlarnos de nosotros mismos cuando estemos mandando a nuestro clon de compras para que nos alcance el tiempo de hacer el amor con nuestra nueva amiga virtual. Nuestro hijos serán la generación XXX quizás... whatever that means!

Acabo de ponerme a leer algunas cosas de Marzo y me di cuenta de que no les había contado que el Sr. Apple muy avergonzado me devolvió mi IPOD hace como 2 meses. El pobre ha ido cogiendo personalidad porque vino como medio acomplejado de los países; creo que me lo mandaron de Texas pero me dijeron que era judío. Imagínate un judío cowboy! Anda vestido con un traje negro y un sombrero de esos que se ponen los judíos. Todavía no tiene barbas porque es muy joven. Dudé mucho en si lo iba a bautizar cristiano, pero tuve que hacerlo porque me dio mucho trabajo encontrar una sinagoga en Capotillo. Así que uniendo las dos religiones y ,considerando que revivió de los muertos después de un jumo de vodka, decidí ponerle Lázaro. Él me pidió que en honor a su pariente lejano “Mr. Tom Waits”, mantuviera el apellido. Yo le dije que encantado, pero que no se le ocurriera tomar vodka, ni bourbon, ni ningún otro alcohol que yo no pudiera catar antes. Se está portando bien el Lazarito, y les manda saludos.

Los ciclos me atrapan y cuando me sueltan se me abren poros nuevos y ruedo lleno de huecos por dentro, gordo y hambriento recogiendo todas las piezas que encajan. Soy un glotón de emociones. Como deseo, como silencio y canciones. Es un ejercicio tragar las palabras dulces que salen de la boca de ella como un sueño transformado en saliva. Es una delicia su encanto y cuando hiere es el frío. Mi metabolismo se ajusta a la ausencia, mientras yo como engaño y decepción y luego soy de nuevo ese glotón. La carne es una llegada, el esfuerzo que hace mi mente por producir el gusto en el centro de mi paladar. Cuando la veo todo me sabe a manzana y mi corazón se pone verde y mis venas se llenan de sangre verde clara y si me pinchas el dedo y chupas, chuparás dulce jugo de amor con sabor a manzana. ¡Qué gula rica el humor nuevo! Cuando vuelva otra vez a saborear los días iguales y tenga que ponerme a dieta de ella para que dure el gusto, seré de nuevo aquél feliz raquítico personaje, de nuevo un servidor.

Sigo posteando cositas... Este link es de un artículo que le hicieron a Juan Campodónico, que es uno de los creadores del movimiento de Tango electrónico, Bajo Fondo, y que es además el productor de Jorge Drexler y junto a Gustavo Santaolalla uno de los mejores productores latinos del momento. Disfrútenlo.
JUAN CAMPODÓNICO

Esta semana me ha dado por poner links de cosas curiosas que me he ido encontrando por ahí. Este es de un torneo para elegir el mejor Tenis de toditos los tiempos. Yo personalmente ví algunos que me dieron mucha nostalgia, p.ej. los Reebok Pump, porque fueron mis primeros tenis cool. Miren a ver cuales fueron los suyos? :c )

THE CHOSEN SHOE

LINK A: Perros "Escapistas" en la zona colonial

La madera suena como si el retumbar de la música tuviera piernas y caminara sobre ella. Yo cierro los ojos y me imagino un montón de pulgarcitos corriendo por el teatro haciendo travesuras. A veces alguno se tropieza y yo puedo oír como se quiebra la fibra y le pasan los años a la frágil madera. Puedes sentarte aquí y escuchar conmigo. Por un segundo olvidarte de que estas rodeado de gente, y ojos, y agua. Olvidarte de que eres mayor y hasta humano. Tienes permiso para ser simplemente una esponja con una sonrisa. Estas flotando justo encima del escenario donde los pulgarcitos no te tocan los pies y sientes como vuelan las notas que suben desde el piano hasta tu oído. Yo que no te veo puedo imaginarte y sin hablar de nada, llegar a ese corazoncito de esponja tuyo y hacerte sentir mi sonrisa. Aquí y ahora no logro entender porque me obsesiono tanto con guardarte y esconderte del mundo. Si dejo que se me escape una lágrima puedo ahogar a un duende allí en el suelo y por eso te escondo aunque no quiero, porque cuando te saco siempre sonrío. Como ahora. Sigue escuchando, yo voy a buscar imágenes hacia donde llevarte y quedarme contigo.

Minor Piano Variation-Jan A.P. Kaczmarek-Finding Neverland

Jugando pelota vasca con mi corazón. Empapado en sudor rojo. Pisando charcos de sangre roja, inflado de aire y sin palpitar. Repitiendo como un autómata el movimiento de mi mano que recoge el corazón justo después de golpear la pared y lo vuelve a tirar. El público está parado con los ojos cerrados, pero sin ninguna expresión. Yo no le presto atención porque mi juego no tiene función, ni fin, ni dolor, es sólo un juego. Con cada tirada el score no asciende ni desciende, pero yo tengo que caminar más, porque el corazón rebota menos y está cada vez más esparcido. En pocas horas ya no queda nada y yo sigo allí parado, y el público sigue allí sentado y el juego sigue y sigue y sigue y sigue y sigue y sigue y…

(Este post y el anterior son imágenes que me encantaría poder dibujar y animar, pero como no puedo, hago lo posible por describirlas).

La pelota vasca - documental de Julio Medem

Drexler de fondo y en mute mi boca. Las letras se me cuelan por la cara buscando un poro abierto y tu no avisas los temblores que de mis párpados brotan. Podría llamarte amor, podría activar con una tecla los ritos de tu cuerpo, como si me faltara una “m” después de la “t” y antes de la “o”. Y tú bailarías descalza pisando mis deseos desarmados en sílabas sueltas, y en la sala de mi casa se haría un fango de palabras, lágrimas de tinta y el sudor de los dedos de tus pies. Bombea el corazón y se me cierran los ojos separándolo todo. Soy capaz de tirarme al suelo y empezar a recoger ese libro de canciones que ya forma el suelo de mi sala y de coger mi guitarra y de esconderme detrás de tantas melodías, sin sílabas perdidas ni letras globulares. Seguiré pendiente del color de tu carne y si te sale una vocal que encaje en “esperanza” te cantaré tu historia, gramática, enlazada, de cómo se huyen los besos y se esparcen las palabras y se baila hasta que no haya más saliva que nos valga.

La verdad que la naturaleza es una vaina grande. Ya sé que voy a decir un montón de clichés y cursilerías, pero ver a mi perra parir ha sido una experiencia inolvidable. Ha tocado cada fibra sensible de mi cuerpo; ha acostado los animales y ha despertado al niño. Es increíble la relación automática que se ha establecido entre los micacos y Ava desde que le salieron de la barriga. Para ella es como si esto fuera lo más natural del mundo: juega con ellos, los lame, los deja lamer. Claro ella no ha tenido la oportunidad de leer los últimos libros del Dr. Nosequien sobre como afrontar el parto, ni como darle afecto a sus bebes en los primeros doce minutos de vida. Ella lo hace porque le sale, y si ustedes le vieran los ojitos jurarían que los quiere con toda el alma. A mi me parece fenomenal. Me ha jodido los planes de la noche y todo, pero no importa, esta experiencia vale por mucho. Y después de 7 años y medio, es casi como si mi propia hija estuviera dando a luz. No me puedo imaginar cuando vaya a ser papá de verdad, porque estaba hecho un manojo de nervios antes de que pariera el primero. Tuvo dos, porque es muy chiquitita la pobre y ahora no quiere saber de mi, ya tiene sus hijos y los tuvo ella solita. Después de comerse 14 pastillas anticonceptivas en el 98, y tener un embarazo psicológico en el 99, creo que ha cumplido un deseo en el 05. Espero que sea feliz.

Pasamos tanto tiempo intentado ser normales. Hacemos rutinas mentales para buscar ese estado de paz interior. Estamos constantemente huyendo del dolor, forzándonos a hacer lo correcto. Yo me pregunto: ¿nos estamos engañando? Y si fuese mucho más interesante no conocernos tanto. No tenerle tanto miedo a ser distintos. Llorar, llorar desenfrenadamente y no intentar encontrar el porqué. Me imagino que sería muy dramático, pero también sería real. La paradoja está en que a medida en que aceptamos este estado de desequilibrio, encontramos el equilibrio que tanto buscamos. Aceptar nuestras imperfecciones, nuestras incoherencias, sin intentar entenderlas puede ser un poco cobarde, pero es quizás la manera más fácil de aceptar la rutina, el desamor, los fracasos y las dudas. No voy a hacer un esfuerzo para ser feliz, simplemente voy a serlo. Y cuando llore simplemente voy a llorar. Si me entiendo o no me entiendo poco importa. Es muy probable que las decisiones que no tome influyan tanto en mi vida como las que tome. Entonces no me esforzaré tanto. Seré feliz y triste. Seré a la vez. Seré.

Podría hablar de muchas cosas tristes, también de muchas cosas alegres. En realidad es un ciclo que se cumple muy frecuentemente en esta cabecita mía. No me gustan los recuentos, ni los discursos vacíos. Alguien me dijo recientemente muchas cosas. Hace falta que te digan muchas cosas de cuando en cuando. Voy a seguir con mi cuaderno de filosofía barata hasta que me canse. Paso página. Comencé a grabar el disco. Los ensayos están saliendo espectaculares y por ahora (bueno la música siempre ha sido mi cojín más cómodo) descanso.

Mi isla, mi pequeña y mediana isla. Mi refugio de sol. Mi inconformidad, mi locura. Posesión, obsesión de seca edad, quiero tenderme aquí y darte otra oportunidad. Las orejas y los ojos de los nativos vigilarán sin quemar caña, sin quemar la bondad, sin amargar el azúcar. Estarán los que prueban y los que dejan de probar por no gastar las suelas. Mi intención no es encender la tierra por la que andan tus pies, es sólo darte pasto para que avives tu sien. Calma la brisa, nadan los delfines, tu pacto y el mío, mi pacto y el espacio, y la paz, y un caos tan pequeño que al juntarse con mi río hace mar y en el mar mueren mis penas.

¿Y si llueve otra vez… y si me levanto otra vez con ganas de quedarme dormido un ratito más? Tuve un segundo para pensarme mejor eso que quería decir y no lo dije. Lo repetí como quinientas veces en mi mente y aun así no lo dije. Tu seguiste por tu lado y yo seguí con mi vida. Nunca hubo intersección, ni complicaciones, ni fantasía, ni amor, ni letanía. ¿Qué pasa si no me cambias la vida? ¿Qué cambia en el universo? Seguiré mi camino y seguirán mis preguntas. Sobre la lluvia, sobre los sueños, sobre las esporas gigantes y sobre ti. Si esto fuera un juego y yo pudiera elegir qué elegiría:

a) Hablar y controlar los encuentros y los desencuentros; o
b) Seguir callado viviendo la rutina del último mes; o
c) Seguir callado e inventarme una nueva rutina; o

Esto es sólo una excusa. Si llueve, llueve. Si me quedo dormido me atraso. ¿Si no te hablo te pierdo? Si, si, si… y en todos esos sí tanta negación. ¿Se puede compartir tanta indecisión?

Cuando yo era pequeño, hacía todo tipo de cálculos matemáticos para crecer. Empezaba a contar los años desde mi concepción, me inventaba historias en las que algún funcionario público había cometido un error y me había puesto menos años y me medía todos los día en una columna que había en el baño de mi casa para ver si de pronto había logrado crecer lo suficiente como para poder cruzar la calle sin ninguna ayuda. Uno se convence de que el objetivo de todo es ser lo más independiente posible. Hasta que conocí a Sahira Fontana, siempre pensé que esta afirmación era cierta. No es que haya nada de malo en ser independiente. Pero cuando conoces a amigas como ella te das cuenta que tanta independencia no sirve de nada sino cosechas amistades que te ayuden a valorar la compañía. Porque no somos superhombres y necesitamos siempre de personas que estén ahí para poder cruzar estas avenidas que el progreso y los años han ido construyendo. Sahira tiene esa capacidad de demostrarte lo divertido que puede ser compartir tu independencia con los demás y lo imprescindible que son los amigos, por encima de las parejas, los trabajos, las rutinas. “La Charlie” no para de crecer y para ella los cálculos no tienen que ir a la inversa porque su corazón es tan grande que ya ha podido cruzar tantas calles como para conservar todavía esa inquietud de niña que todos añoramos hoy en día. ¡FELICIDADES CHARLIE! ¡Se le quiere naturalmente!

Hoy el día ha estado para chocolates y cafés con leche calientes. Yo me la he pasado mirando por la ventana buscando espacios para escribirle algo a mi hermano el café con leche más dulce y chulo que hay en este pedacito de isla. En eso se pasa uno la vida, esperando los espacios para compartir con la gente que uno quiere y al señor Janio Lora no se le puede querer demasiado. Wassum, uep, ajum, ajam, ofrécome con la manito al aire y la risa descontrolada! Qué puedo decir de Janio sin que me quede corto. Con él vamos a iniciar otro fin de semana de cumpleaños. El domingo seguimos con otra hermanita. Parece que tengo una afinidad increíble con los Tauro. Para mi hermano por hoy, un día de lluvia, el abrazo más caluroso y los mejores deseos. Esta noche los cantamos!

Mi cerebro se enconje. Falta de lectura. Demasiada cerveza o ciclos que operan en equilibrio con el cosmos y pactan mis propios cambios de estación. Entonces para mí, a pesar del calor estamos en otoño. Las hojas en la calle son las letras de las canciones fallidas que voy tirando desde mi apartamento. El testamento, la miseria, la melancolía, son temas junto al sexo, el pudor y el amor. Hay infinitas verdades, y muchas maneras de quedarse corto. Uno canta hoy una canción que mañana se quema. Uno canta y se quema. Una canta y ahoga todas las dudas temporalmente. Siempre temporalmente. El otoño verde en la ciudad de Santo Domingo es un otoño despierto no como el otoño de Europa. Pronto será primavera otra vez y pastarán los dóciles animales que hoy se preparan para invernar. En mí, quedará siempre el movimiento de una ciudad cansada, las hojas que se quedan encima de la mesa y la certeza de que nada nunca volverá a ser igual.

Anoche me desperté 5 veces; esta mañana se fue la luz como 5 veces; tengo 5 picadas de mosquito del fin de semana que me están volviendo loco; hay como 5 razones por las que no estoy escribiendo frecuentemente en el blog; y hay otras 5 por las que hoy hay motivos para celebrar: 1- Rosanel cumple casi 25 años hoy, ella nació casi 5 años después que yo, y es como 5 veces, una de las personas más chulas, dinámicas, buenas y bestialmente queribles (anoten esta palabra en el diccionario ;-) que yo conozco; 2- Alex, el primo de Ferreira, saca su nuevo disco con aspiraciones de platino y vamos a llevar como 5 guaguas llenas de fans que adoran como Alex mueve los 5 dedos de su mano derecha cuando toca la guitarra. 3- Ayer entregué la administración de mi edificio, por lo que hoy me siento como 5 veces más ligero; 4- Tengo, tengo una hormiguita en la panzita, que me, que me hace mucha cosquillita, con la a…; 5- Tengo como 5 tornillos sueltos, hoy es día 5 del 5 del 2005, por si no lo sabían y no hay que dar 5 razones más. Felicidades manita y pide por esa boquita que hoy te concedo hasta 5 deseos!

A mi con mis aires de Rock Star de escritorio, nunca dejará de sorprenderme la humildad con la que mis amigos se colocan el traje de superhéroes y se sientan a escucharme. Me han escuchado tantas veces que cuando pagan para apoyar este capricho de corazón que es la música para mí, no puedo sino agacharme y decir chapeaux, gracias, los quiero un montóooooon, no me dejen cantar solo que me salen ampollas en la garganta.

Comprobé varias cosas: a) Que no doy pa negociante; b) que disfruto más los conciertos cuando no tengo que encargarme de la producción, promoción y organización del evento; c) que poco a poco vamos llegando el sonido deseado y que ya es hora de que termine el disco para que podamos cantar las canciones con gusto. Así que hasta próximo aviso este fue el último concierto antes del lanzamiento.

Gracias de todo corazón por haber ido y por los comentarios que han ido dejando en el blog. También son bienvenidas las críticas que yo siempre escucho a discreción.

Como yo se que se van a ir esta noche, aquí les dejo un caramelito para que vayan endulzando la boca. Son las canciones del concierto que hicimos en Casa de Teatro el 26 de febrero. Espero que las disfruten y no dejen de venir y cantar!

No Habría más
Lucecita
Llevatelo Todo
Palabras En El Aire
Nada
Ella la Artista

Sólo por hoy, y en venta anticipada, el que compre 4 entradas para el concierto de mañana se lleva una por sólo 70 pesos (Que es lo que cuesta el trago gratis de el Cinema Café). Es decir que está regalada. Sólo me tienen que llamar a mi al cel. 8854237 o pasar por Bululú Films (calle 30 no. 12). Esta oferta se agota esta noche a las 12.

Rock del bueno, que sale por los pies de los primos locos, que extasía, da buen rollo y contagia. Si yo tuviera que elegir, elegiría ir a ver a Pie Izquierdo o la versión más cercana de unos roqueros argentinos nacidos en Azua que pueda haber por este lado del planeta. No se lo pierdan. Esta noche en el Cinema Café a partir de las 10.

Tengo un dilema sobre el nombre que va a tener el próximo concierto del 26 de abril en la cinemateca y me encantaría recibir su vital ayuda así que aquí van algunas opciones; siéntanse libres de opinar y mandar sugerencias:


Marel (o Marel alemany)...
- en el patio de los sueños
- en el patio con pantalla gigante
- libre libra libro (es en la feria del libro y soy libra ;-) )
- improvisando idiomas
- buscando su animal (jijijiji)
- por decir algo
- ojo de mago
- detrás de las palabras

Déjenme saber chic@s! Abrazos

El trabajo vuelve a hacer de las suyas y me aleja de mi cotidiana cita con la escritura. Pero bien. Tiene que haber espacio para todo en la vida y a mi me gusta mi trabajo, ambos trabajos, así que espero que disfruten de mis visitas esporádicas por estos lares. Precisamente esto es lo que nos ha animado a Janio (Pie Izquierdo) y a mí a mover pieza nuevamente y a levantar de sus sueños más profundos a esa legión de groupies latentes que ahora duermen entre los brazos de algún otro artista. Y así, Flash anunciamos que tenemos concierto para YA; ellos el viernes 22 de abril; yo el Martes 26. Todos dentro del marco de la feria del libro en el Cinema Café que está detrás de la Cinemateca Nacional. Y así se unen mis aficiones favoritas en un solo lugar: el cine (que es mi medio de vida), la lectura y escritura (que me encantaría que lo fuera más), y la música (que es mi sangre). Con este nivel de desnudez yo creo que se pueden imaginar el despelote que van a ser esos conciertos, así que no se lo pierdan. Todos estos días estaré escribiendo algo relacionado. Abrazos a todos.

Turn over the page. The sinner, the grateful smile, the lone ranger, the fucked up marriage. The man sitting on the next table looks at me as if I was a freak not dress in the usual cotton. I winked a smile and continue my journey of good Rock and Roll literature. I wasn’t expecting much but the words that came out of the magazine where like probers, prophesying future love and wisdom. Drugs on the house, the boat, the road. Music living creatures. The lines written in Classic Times are the perfect example of were our culture has gone. The cover: Pop Music, Art, Rock, Soul renaissance. Reading this you can understand clearly the meaning of Postmodernism. I asked my self how much money I would need to feed myself with such an enormous variety of information. These blogs, the life within are nothing without that kind of knowledge. When should we start to dream about the perfect use of our time. The magic in those words never reveals its consequences. Because there’s work and there’s money, and there’s responsibility and relationship. We should be happy no matter what we dream of. I relish a good and beautiful fucked up story. The life and the lyrics of a great song and the transparent beating of a good heart. Be grateful Rolling Stone.

Pensemos en conceptos complejos. Cuantas veces hemos pensado en la importancia de la seguridad de una caricia. La naturalidad. Cuantas te has parado a pensar en que el calor que emanan sus pies es perfecto para tu temperatura corporal. Cuantas has pensado lo vital que pueden ser los ojos de una Geisha. Dos dedos rozándose pueden mover un iceberg. Un dedo sobre una boca. La yema de un dedo rozando la carne de unos labios tibios y húmedos. La sangre te sube a los párpados y te hace temblar. El miedo aprieta el corazón y lo lanza hacia lo desconocido. El filo de tu rodilla puede cortar su entrepierna y no hemos pensado en nada bueno hasta ahora. No hay pensamientos sanos. Nadie quiere pensar en eso que los ojos gritan y los dedos no entienden. La lengua se hace dueña de todo. En un instante hay líquido en el aire, en las sábanas, en la superficie de la piel y los conceptos se van divagando. Se escucha un pequeño gemido rebotar de la pared como un eco y el corazón suspira. Cuan importante puede ser un beso de sangre. El dolor es un placer lejano, escondido en el centro del tímpano que por momentos ensordece. Y la lengua sigue haciendo de las suyas en cualquier cordillera. Conquista, reconquista, atraviesa y retuerce los ligamentos de un cuerpo cansado pero sediento de más. Los ojos interpretan la luz y la memoria se encarga de guardar este momento para que tú te preguntes algún día la realidad, el principio, la extraña facilidad con que la dos cuerpos se entienden, se nutren de lujuria y se rehacen en una carnal y compleja luna.

Salta la sal de sur y los paisajes secos. Yo suspendido de un salto me agarro de las ráfagas de aire y respiro profundo; me lleno los buches de experiencia natural y caminatas largas, casa de campaña en un solar de tierra, río, piedra, corriente y noches de luna llena. La madera se quema intencionadamente en los montes y yo observo a mi tierra morir, al hombre regar, y a la entropía apoderarse de años de evolución geológica. Mientras, me aprovecho de un baño y una fantasía. El hedonismo se apodera de mi cuerpo mientras mi piel respira azufre tibio envuelto en burbujas de caricias y cariños de piedra. Cómo habrán vivido los buenos caciques, o más allá, en la verdadera India. Sueño con Elefantes, mujeres exóticas y pétalos de rosas moradas, sueño con la libertad extrema y cierro los ojos rodeado de la fantasía más real y palpable; la compañía de exploradores con botas mojadas y corazones silentes. El camino que pasa por la realidad, me dice que esta fue una buena decisión, una de las sencillas. Extiendo mis brazos en busca de equilibrio y encuentro que los cimientos de mi isla son ligeros pero se esparcen por kilómetros, por diversas realidades, por dolor, por amor, hábito, costumbre y aventura. Si hay motivos para ser feliz, y hay motivos para estar triste, no tengo porqué preocuparme. En el horizonte siempre saldrá el sol siempre se volverá a esconder. Yo soy simplemente parte de este maravilloso ciclo.

De todo lo que va a pasar esta Semana Santa, lo que más me va a joder es no poder compartirlo con ese grupo de mamis y papis chulos (para ponerlo en las palabras de Janio) que se hacen llamar los SuperAmigos. Voy a hacerle caso al Papa y me voy a tomar todos los días unos minutos para la reflexión e intentaré imaginarme a Rosanel y a Chio batíendose en algún rincón de la ciudad o sucedáneos; al dúo dinámico (Janio y Janio Mikes) completando las risas que nos han faltado tanto en este cuarto de vida que llevamos; a Emy quedándose hasta tarde sin tener que ser arrastrada fuera del salón de la justicia; a Maria en Love por la zona colonial. En fin, yo vendré con fotos para asquerosear, pero que sepan que me voy pinchado por no poder tener dos cuerpos y compartir con ustedes lo que seguro voy a compartir por allá.

P.D. Bro! También me acordaré de ti por allá. Ah! y Perdona por no conectarme anoche, pero es que tuvimos un problema tecnológico de tamañas alturas. ;c)

Hoy en día es más fácil viajar para enlistarte en algún ejercito que para hacer el amor, o vivir del amor o morir del amor. Algunos ya ni creemos en el amor de tanto poner fronteras.

¿A qué usted viene señor?
Yo vengo a alistarme en el ejército más sangriento y abusador de todos los tiempos.
Ah! Pues pase adelante y pongase alante.

¿A qué usted viene joven?
Yo vengo porque estoy enamorada y quiero vivir con un ángel que lamentablemente vive aquí y no en el cielo.
¡Ay no! Usted no puede pasar, usted lo que quiere es quedarse a vivir de este país ¡Ay no!

Defender las fronteras del terrorismo, del hambre, de la invasión de coeficientes menores. Defender la calma y la libertad. Ese es el lema de las naciones poderosas. Y nosotros escuchamos:

Yo ser gringo, no me importa tu nombre. Yo venir a este lugar con playa a poner compañía para llevar dinero a mi casa, para poner una reja grande y no dejarte entrar, ¿comprende? Muy bien, ok, pues tu ser mejor agachado y tranquilo que yo traigo la vaselina.

Y morimos en el anonimato, y nos ponemos nombres gringos para disimular y nos vamos subiendo unos encima de otros porque los políticos siguen vendiéndole la tierra a los conquistadores. Y nos enamoramos y no nos dejan entrar para poder salir de tanto desencanto.

¿Yo le voy a preguntar una cosa a usted oficial? ¿De donde era su abuelo, o su bisabuelo, o su tatarabuelo? ¿Indio? No verdad. ¿Y su mamá se casó con quién? Con un tipo que conoció en Polonia, o en Sicilia, o en Israel, o en Cuba. Y entonces quien coño le dice a usted que yo no tengo el derecho de venir a aquí a hacer lo mismo. Yo vengo a comerme a besos el mundo, vengo a deshilachar las banderas, vengo a comer del cerebro de los locos, vengo a vivir conmigo, no con su abuela, así que dejese de vainas y déjeme pasar.

Por una amiga y un bonito texto que nace de la nada…

Debora las verdades de la gente en menos de un minuto
Y busca y busca en el espacio de dos sonoras fantasías.
Veintidós es poco todavía y es justo lo necesario.
Si se pierde buscando se pone el chaleco antibalas y vuela
Le encanta volar porque se colgó de una nube nueva
Se embarró con sirope de cereza y libido mojado
Y encontró la víctima de los días subsiguientes.
La verdad número dos es que es temprano todavía
Para subir, para bajar o para seguir buscando
Dicen los haraganes que esperan para subir al tranvía
Y ella baja la cabeza se envuelve en su capa y vuela
Se pierde por la ciudad, por la mezcla del azul, verde y rojo
Se pierde por la telaraña virtual, pero sigue buscando
No creo que me detenga ahora, dice SuperMaria
Mientras se enfunda un goloso cigarrillo y canta:
“Hay amor suficiente para no parar nunca”.
Descubre y su animo ilumina el hormiguero que trabaja con calma
Descubre por todos los vagos del tranvía
Ahora descubre por ti y contigo y aviva el tesoro
Ahora ya tiene cómic, e historia y futuro, y biografía incompleta
Y salto cualitativo de verdades, y excelente progreso…
Algún día nos veremos en el espacio Maria, sin tu diptongo
Y con todas las almas que te definieron y te catapultaron
A la cabeza del salón de la justicia.

Uno se busca y se busca. Vive siempre en gerundio buscando. Se busca a uno, se busca en los bolsillos. Se busca pareja y celo y necesidad de amarse. Se buscan razones. Se busca una identidad hecha de retazos de identidades falsas. Se busca tanto.
Que tal si un día nos decidimos y empezamos a ser nosotros mismos. Hablamos abiertamente de eso que nos molesta, lo que nos mueve, lo más sencillo, lo más complicado. Y dejamos de buscar encontrando. Lo sexual, lo virtual, lo banal. Quiero desnudarme en medio de la plaza más pública y no sentirme avergonzado. Por un día, sólo por un día, o por todos los días que haga falta hasta que pasemos esa fase en la que tenemos que agachar la cabeza. ¿Sería demasiado arriesgado? ¿Nos perderíamos el respeto? Es probable. Pero eso no pasa por ser nosotros. Eso pasa porque tenemos que dejar de juzgarnos tanto, de criticarnos tanto. Cada uno de nosotros ha pasado por momentos de estupidez extrema y momentos de brillantez absoluta, así que porqué no podemos asumir que todos tenemos esa capacidad. Si quieres ir a la Iglesia, bien. Si quieres divertirte con dos o tres mujeres, o con uno o más hombres, bien. Si no quieres hacer nada, bien. Tu eres el único que puede decidir cuando te has cansado de tal o cuál cosa. Mientras tanto yo me puedo reír con todas las cosas que tenemos en común y no con aquellas que nos hacen diferentes. Mi utopía, algún día.

Blanca nube de voz negra. Voy dando pequeños saltos de algodón y me río como un niño. “You Love me, you really love me” con esa picardía alegre de ti. Common Nina, no me tientes. ¿Porqué tu nube no puede dar vueltas indefinidamente? Vamos a abrir un piano bar de los más chic aquí en el cielo. Las butacas van a tener una vista increíble. Live long. I promise you. La luna entera no se atreve a mentirte. Nina no te conformas. Tu voz brota de esa sangre antigua. Me levantas y empiezo a bailar entre los aviones. Oh Nina, ya es tarde, acompañame a la cama y te prometo un viaje y vacaciones en mis sueños.

La ves cerrar los ojos y buscar profundo. Hay cosas en el sótano del alma que no hubieras imaginado. Tanto polvo encima de tantos recuerdos que nunca puedes anticipar cuanto sentimiento hay almacenado. Por unos segundos el corazón se monta en su montaña rusa y parece perderse en un agujero negro en medio de tus pulmones. La voz de un ángel sale a mezclarse con esas preguntas terrenales de todos los días. Ella no canta para la galería. Ella canta y saca sus demonios. Alguien algún día patentará esa droga y entonces cantar así será un delito, solo para ser deleitado por una minoría.

Sube el humo por entre las mesas y con los ojos cerrados puedo escuchar el sonido de las teclas cuando golpean la madera, el temblor que causa el bajo en las vigas de la casa, el aire que sacuden las escobillas de la batería y cada sorbo de saliva que pasa por tu garganta antes de convertirse en música celestial y eterna. Tu corazón quiere violar el electrocardiograma y se monta en el mío y lo saca a bailar una de esas canciones. Aprovecha una pausa. Detén tu mirada. Mi cerebro repite el deseo casi con la misma insistencia con que mueves las manos. Posa ese aliento de diva en mi ordinario saco azul y despégame del suelo. Don’t die, estoy en repeat contigo. Don’t go, casi me siento absurdo. Ven conmigo a la cama, ven conmigo. ven.

(Necesario escuchar a Nina Simone cantar para leer este texto. Si es simultáneamente mejor).

Se me perdió un animal enjaulado, sucio, repugnante, pero dulce y tierno como la esponja de baño que te limpia los pies en mi bañera blanca. Se me perdió el sentido, la caligrafía, la ortografía y la pornografía al mismo tiempo. Básicamente me he quedado vacío. Los colmillos de la loba me rozan los párpados y yo permanezco inerte, alejado de cualquier sensación de dolor o deseo. El animal en cuestión es barato, ladra y muerde mucho pero sólo en celo. Es negro, mulato y blanco, tiene agallas de pez y sangre de camaleón. El animal lo es todo. La razón es hueca y el temblor en el centro del pecho es ficticio. De los siete dedos que comparto con mi perdido animal, sólo tres le sirven de apoyo, los otros quince dedos son para descuartizar corazones. Tenga cuidado si lo encuentra, es tentador. Su saliva envenena con ganas y más ganas, pero no hay forma de ganarle a mi prófugo amigo. Mi sexo, mi hechicero, mi libido dormido sin el olor perforante de mi animal prohibido. Desempolven las sábanas y saquen tierra nueva de sus suelas, mi animal si aparece no escatimará en cuerpos y volverá a su reino con la eterna energía del animal perdido.
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No se vivir de otra forma que no sea la sensata. Y sensata, me dice Norma, no es la vida. La vida está llena de contradicciones, de eventos fortuitos que tiran toda la sensatez por la ventana. Pero entonces ya entramos a discutir temas más profundos, por ejemplo, qué es la sensatez en sí misma. Para un yupi rico de cualquier familia americana (toda América), lo sensato sería estudiar una carrera tradicional, heredar un montón de dinero y juntarse con una chica de igual fortuna para perpetuar la especie rica en el planeta. Pero para un joven de clase media, de una familia de buenos valores humanos, con inquietudes sociales, lo sensato sería abandonarlo todo y unirse a una ONG, o mejor aún cambiar el mundo, o lo esencial: perseguir un sueño. Entonces lo primero que hay que hacer, yo le digo a Norma siendo sensato, es identificar quién eres tú en realidad, el yupi o el joven progresista. Ante un análisis de esa magnitud, Norma siempre se junta de brazos y me mira como quien mira a un perro que no entiende nada, y luego se va. Yo me quedo sólo ocupando los espacios vacíos que quedan en mi cabeza e intento organizarlos en una realidad coherente. Entonces Norma llega de la cocina a terminar la guerra que antes había comenzado: “¿y las pasiones? ¿Cuando cuentas con ellas en tu sensatez? Yo me muerdo los labios porque ella sabe que las pasiones pueden ser sensatas también, pero ya hemos tenido mucho esta discusión y yo sólo me limito a responderle: “¿Y tu crees que es sensato que tu quieras confirmar de mis labios lo diferentes que somos?. Roja de ira, Norma se va con los brazos tensos aguantando los movimientos bruscos y ahí se acaba la conversación. Fui a ver al doctor poco después de esa conversación, me dijo que tenía cáncer en un pulmón, y yo nunca he fumado. Cuando se lo dije a Norma, no paró de llorar como por tres días. La primera vez que hicimos el amor después de la noticia se me salió el corazón por la boca; ella no paraba de llorar mientras tenía un orgasmo silencioso y prolongado. Yo la sensatez la he mandado a la mierda, aunque es sólo sensato que alguien que no tiene más de un año de vida se pueda permitir lujos así. Me he dedicado a irme por el país a conocer a toda esa gente que nunca quise ayudar. Ocasionalmente salto de algún que otro paracaídas. Me gusta nadar hasta que no puedo ver la orilla de la playa. Le fui infiel a Norma una vez, pero la conciencia no me dejó tranquilo como por una semana y entonces decidí que era mucho trote para tan poco tiempo. Vendí todos los carros y me quedé con un motor y una bicicleta (Me gusta más la bicicleta, pero hay días que no puedo llegar ni a la esquina). Norma está mucho más preocupada que yo, los roles se han invertido en la relación y ella me ruega constantemente que no sea insensato que hay cosas que me pueden matar y que ella no quiere dejar de vivir conmigo ni un minuto de los que nos quedan. En la cama con vistas al mar que Norma me ha conseguido para ayudarme a morir no dejo de pensar en todas las cosas que me hubiera gustado hacer. Todas las teorías sobre la vida que había elaborado con tanta precisión durante mi primera juventud parecen ahora cosas de niños. Me siento con confianza ahora que me voy, de que lo más importante es hacer lo que te pida el corazón (no el cuerpo, ni la mente) porque incluso cuando te equivocas te sigue quedando la satisfacción de lo vivido. Estar con Norma fue la decisión más irracional que tomé en mi vida y fue la más acertada.

Estaba buscando una excusa para llevar mi nuevo iPod a Apple y que me lo recambien. Es que llevo menos de una semana con él y el jueves por la noche cuando llegué a mi casa se me había derramado media botella de vodka debajo del asiento donde había puesto el ipod para que no se lo robaran. Uno se ilusiona con las cosas materiales y las protege y siempre encuentra la vida una manera de demostrarte que el dinero es lo más efímero que existe y que las ilusiones es mejor ponerlas en otro lado. Pero bueno, el caso es que el viernes de resaca, me la pasé pensando que iba a hacer con el &*(^#@ ipod, porque era un poco obvio que se había dado un chapuzón en vodka y que ahora o no podía o no le daba la gana de sonar a los Rolling. Y luego me di cuenta que no había sido culpa mía y decidí escribirle esta carta a Apple.

Estimado señor Apple
USA

Le escribo esta carta porque recientemente me compré un iPod en una de sus tiendas. Los primeros días todo estaba bien, pero como al tercer día (Notese que ese fue el tiempo que tardó Jesú en resucita) lo notaba un poco confuso, como medio apagado. Pensé que era cuestión de baterías pero cuando le prendí se puso como loco, experimento como una especie de locura temporal… daba griticos de alegría pero luego entró en una profunda depresión. Sonaba la canción de Tom Waits “I hope that i don’t fall in love with you”, y se apagaba. Entonces me llegó un olor un poco raro, bueno muy habitual pero raro en esta pequeña maravilla de la tecnología. Era Vodka, definitivamente. Mi Ipod se había dado un “jumo” (Me costó traducir esa palabra al inglés) de vodka. Y volvió a sonar por última vez. Tom Waits recito las palabras “One last round” y se esfumó. Entonces lo comprendí todo, ¡Mi iPod estaba poseído por el señor Waits y ahora en vez de música emanaba alcohol!
No se imaginan la frustración que esto ha provocado en mí. Yo soy una persona decente, casi no bebo y tengo que aguantar que uno de sus aparatos se me emborrache así, simplemente porque ustedes no pueden evitar que se contagie del espíritu de las canciones. Es una vergüenza que una compañía como la suya no haya tomado las medidas necesarias para prevenir esos incidentes. En fin señor Apple, pórtese bien conmigo y cámbieme mi ipod y así todos tan contentos (no tendré que poner una demanda ni mucho menos por incitar a los jóvenes decentes como yo a beber alcohol). Pero no se preocupe por solucionar el problema, yo a partir de ahora sólo voy a escuchar a Britney Spear y a Christina Aguilera, a ver si me sale algo bueno esta vez.


Atentamente,
Marel Alemany
(Muy dolido)

Yo creo que está decente la carta. Ustedes creen que me cambian el iPod?

Estaba ahí volando por encima de la ciudad, con mi Ipod recien comprado, con el sueño acumulado y la ansiedad a flor de piel. El camino desde el hotel al aeropuerto lo había hecho en una nube que me había prestado alguien en una conversación del messenguer el día anterior. Me distrajo un poco. En EE.UU. las predicciones son que con el calor volverá el existencialismo, así que yo me estaba preparando para el huracán primavera de largos días de lluvía existencial y dolorosa. Había decidido escuchar todo lo que estuviera en la librería de itunes, sin seleccionar, al azar, a ver que se me pegaba. Pasé por el color turquesa del mar caribe oyendo una canción que había grabado unos meses atrás. Me pareció hermoso, quería bañarme en los arrecifes sin arena y nadar como un pez, pero todavía volaba y no había adoptado la condición de pez volador. Los Beasty Boys pasaron con maletas en las manos y máquinas antiexplosivos cantando Jump, everybody, Jump, y mi ira existencial se iba apaciguando. Santo Domingo había estado cubierto por la niebla esos días, porque las nubes estaban cargadas de lágrimas reprimidas. El psicólogo de la ciudad había diagnosticado un extraño “complejo inglés” para la isla y a mí se me ocurrió que lo mejor que podía pasar es que nos volviéramos ingleses y empezara a fluir la creatividad por las malogradas calles de la capital. En esto el ipod se conecto conmigo y me puso una canción de uno de los grupos ingleses más grandes: Los Rolling Stones. Elevado por la 27, en medio de una sinfonía de introducción, me pareció ver a alguien colgando la ropa muy cerca de mi ventana, pero no me llamó tanto la atención como la letra de la canción que había escuchado tantas veces y nunca me había detenido a descifrar. Dice Mick Jagger, que no siempre puedes obtener lo que quieres, y repite, no siempre puedes obtener lo que quieres, y no se cansa de decir, que no siempre puedes obtener lo que quieres, pero que si lo intentas a veces te puedes dar cuenta que obtienes lo que necesitas. Una gente muy buena que lo acompañaba con la guitarra y un órgano casi celestial y yo me quedé pensado en la letra, en lo inglés que se había levantado Santo Domingo, en lo existencial que comenzó marzo, y en que es verdad, pura verdad, pensándolo bien, cuando lo he intentado no siempre he conseguido lo que quiero, pero siempre he conseguido lo que necesito.

Lo siento chicos(as) pero el concierto que teníamos programado para esta noche ha sido cancelado por falta de patrocinio. Pero no se preocupen porque seguiremos haciendo el esfuerzo y la inversión para tener un espacio y volver a sentir la vibra a la que nos estamos habituando en cada concierto. Yo prometo corazón. Por ahora, no seguiremos viendo por ahí y cantando ocasionalmente en algún que otro lugar. Mientras yo voy a aprovechar para grabar el disco con la ayuda de Peter. Un abrazo a todos.

Paralelismos

Una calle que sigue a la otra, gemela y estrecha como la otra. Yo en Santo Domingo y en Miami, viendo el mundo, viendo mi trabajo, viendo la magia desbordarse en los blogs y viendo como los blogs se desbordan y abren espacios. Somos definitivamente una generación diferente. Dice Kenneth Gergen que somos postmodernos, porque antes la sociedad vasculaba entre épocas románticas y épocas racionalistas pero que ahora todo es un mofongo de complicado (bueno él es americano y no lo dice así). Un prólogo un poco complicado para un blog relativamente simple, pero que le vamos a hacer, es la postmodernidad. Recuento que canté el sábado y disfruté el sábado como un niño y que me doy cuenta que soy afortunado porque estoy rodeado de corazones blancos y de feeling (Gracias Janio, Janio Michael, Magia, Mario, David, Jeffrie, El Poeta, Alex, Supermaría, y todos los que tuvieron que ver con el concierto, los que fueron, lo que gritaron, los que cantaron, los que se quedaron después, a todos) Pero como mi vida es paralela, después del concierto me toco ir a ver una locación con Rosanel (Que bueno que pudo ir) y levantarme a las cinco de la mañana para filmar todo el día un comercial que acabó como a las dos de la mañana. Dormí como una hora y me levanté pa ir a Miami, llegué y me pasé el día trabajando, como hasta las 8 de la noche (aunque por un momento creí que era más tarde porque paralelamente en Santo Domingo eran las 9). Me encontré con Nic (Nicole), bloguera nostálgica de su tierra, que todavía conserva su acento a pesar de llevar como 15 años en EE.UU. Es otra de las razones por las que hoy he aludido a la postmodernidad, porque nuestros abuelos ni de coña se creen una historia así: yo hablándole como mi acento dominico-español y ella con su acento dominico – spanglish de Miami – colombiano (vaya dos). Total que antes de que se me cerraran los ojos decidí que estaba bueno de paralelismo por la noche. Me hacía falta mi columnita diaria y mi tour de los blogs más queridos. Eso, “que los he echado de menos tíos”. Ya estoy aquí para quedarme y si el trabajo no me lo permite pues nada eso quiere decir que me estoy haciendo rico e insoportable (jejejeje). Hoy caí a la tierra de la mano de mi trabajo nuevamente, y la noche terminó bizarra con la Charlie en Cinema Café (lo de bizarra, es un código). Este es el primer y último blog de recuentos que hago, porque no me gusta mucho, pero es que me sentía en la necesidad de hacerlo y así me ahorro muchas explicaciones. Vayan preparándose porque los voy a atiborrar de historias esta semana. No caminen descalzos si no se quieren mojar la planta de los pies y por favor quieran, quieran mucho (Mensaje paralelo fruto de poco dormir – que no es lo mismo que el insomnio).

Marel y yo decidimos reconciliarnos por unas horas y dejarnos caer unas frasesitas por el blog que ya me hacía falta. El está muy ocupado, con tanta filmación y tanto concierto. Pero me dijo que no podía cantar sin antes anunciar que lo iba a dejar todo hoy, que le quedaban dos horas para ser él esta noche, y para escuchar a Janio y ser feliz con cualquiera de los pies que falte. Yo me quedaré en casa esta noche y lo dejaré ir sólo. Hoy sólo hay noche para uno de los dos. Y probablemente sólo haya semana. Así que yo me quedo aquí aunque no escriban y después de ir a verlo hoy pueden dejar sus comentarios y un servidor se encargará de hacercelos llegar directo al corazón. Un abrazo compañeros y compañeras de insomnio y filosofía. Bravo Pie Izquiero. No dejen de ir.

El caos se organiza para que los insomnes encontremos el sueño. El olvido recuerda y entre cuerda y cuerda siempre queda tiempo para echar unas risas. El sueño no me lo quita el trabajo que de repente sobra, ni la música que milagrosamente está presente sólo en la versión deseada. El sueño me lo quitan los sueños y no poder soñar, una contradicción que a lo mejor sólo yo entiendo pero que es suficiente para empezar a explicar este anagrama convertido a blog y su ausencia.
Vaya semana! Después de varios meses casi de vacaciones, caemos en la semana del último concierto de febrero, quizás el más importante, y nos empiezan las prisas. Comienzan los ensayos con la banda casi completa, y hay que estar pendiente de no herir ninguna sensibilidad mientras llamas a los músicos como cincuenta veces para ponerse de acuerdo en una hora que le venga bien a todos; Hay que coordinar la promoción, vender entradas, pensar en la televisión; Todo esto pasa la misma semana que me aprueban el primer proyecto del año, que es además uno de los pocos que vale la pena, pero que es para hacerlo en un tiempo récord de una semana y arranca la vorágine. Llamadas a Argentina, a Los Angeles, llamadas a dos Jaimes distintos y en mi cabeza una división: la parte izquierda, la creativa, ha creado una dupla para encargarse del tema musical y otra para visualizar los mejores planos de mi vida; la parte derecha tiene que pensar en negocios, y en organización y en números, y en la compra, y en que tengo que traspasar la administración del apartamento, y en que la muchacha del servicio no vino hoy y no me dijo porqué. Y eso no es todo, porque siendo futbolero como soy, no puedo obviar que esta semana también recomenzó la champions y su fantasy league, y me llegó mi juego favorito (WE8), el cual no he podido casi ni abrir.
Por si todo esto fuera poco mi Blog me pide comida, me tira de la moral y me apunta con su dedo acusador: “escritor de poca monta”. Ayer hasta me puse a escribir estrofas basadas en simples conversaciones (bueno nunca son simples en el salón de la justicia). Y yo me pregunto: Qué será de Quirino, y el metro, y el dólar, y los casandras… que se jodan, esta semana yo sólo tengo tiempo para hacer y deshacer a placer. Y mientras el sueño me venció porque, a pesar de todo tener tantas cosas en las que pensar te alivia el corazón y te prepara para afrontar un nuevo verano en esta maravillosa y calurosa ciudad.

Hoy me levanté a las 7:30 yo solito, exáctamente como me acosté, porque tenía la cabeza a millón, entre sueños de cosas que me encantaría que pasaran y realidades que me persiguen hasta en los sueños. Y no pude dormir más, después que me di cuenta de que tenía que escribir algo, no pude dormir más. Me costó integrarme al mundo de los vivos, porque yo creía que estaba despierto por la lucidez de mis fantasías, pero eso también era una ilusión. En menos de una hora he escrito una canción sin música (pero que estoy muy orgulloso de la letra), un comentario en el blog de Janio, y más o menos lo que llevo escrito de este blog de hoy. No creo que me vaya acostar ahorita mismo. Lo peor que puede pasar (y ya pasó) es que me ponga a revisar las cosas que he escrito en los últimos dos años y darme cuenta de los cambios. Vuelve el insomnio señores. Cargado de sorpresas. Vuelve el insomnio fértil y voraz. Volviendo a la realidad del día, me toca trabajo y recuento. Anoche estuve en 8 puertas, asistiendo a una de las convenciones semanales de Blogadictos. Las noches se hacen más cortas últimamente, así que creo que estamos perdiendo fuelle. Lo que si quedó bien fue el concierto, porque después de algunas precariedades, algunas sinceridades, algunas tensiones tardías, decidí entregarme y eso siempre funciona por encima de los problemas materiales que puedan existir, y disfruté mucho, y me sentía colgado como en el flyer y me dio hasta para dejar algunas palabras en el aire. Gracias a los que fueron, a los que ayudaron a reanimar mi insomnio, a los que me abrazaron, antes, durante y después de la noche y si esto fuera el discurso de un Casandra, gracias por producir mi vida día a día.

No tengo que explicar que cuando veo las caras de mis amigos, de mis futuros y presentes amigos en medio del público se me abren los poros y las notas me salen rojas con sangre del corazón y entonces soy una marioneta al servicio de todos. Mi voz para ustedes señores. Nos vemos en 8 Puertas esta noche.

Ultimamente estoy teniendo muchas ideas. Muchas quedan descalificadas poco después de pensarlas, pero esta mañana tuve una que ojalá y sea adoptaba por toda la humanidad, especialmente por la de aquí de R.D. Y es que yo vivo con mi perrita, Ava, a la que muchos de ustedes conocen. Y es un amor, a veces hasta la desesperación. Pero hoy me di cuenta que satisfacer sus necesidades es sencillo. Si te levantas por la mañana, o llegas de la calle, o te pasas mucho tiempo sin hacerle caso, ella va y se acerca eufórica y te pone sus patitas en tu pierna y te mira con una carita irresistible y te pide, literalmente te pide que le des amor, se intenta subir y luego se tira al suelo con las cuatro patas pa arriba demandando cariño. Yo a veces pienso: “¡que puta!” “es que no se puede ser tan hedonista”, pero la pobre perra no entiende porqué yo soy así. Hoy cuando se me subió en la pierna, mi primer instinto fue echarla a un lado (ya lo hago por costumbre) pero no lo hice. Le acaricié el caquito, la mire a los ojos y cuando se tiró con las cuatro patas pa arriba le hice cosquillitas con los pies. En total fueron como dos minutos de placeres (por favor los mal pensados que se retracten), y luego se fue sin yo darme cuenta a sentarse feliz en un rinconcito al lado de mi cuarto. Cuando empezaba a recoger las cosas para irme, la vi, y me di cuenta que esto pasa siempre, que ella jode para que le den cariño pero cuando se lo dan, aunque sea un chín, después de un tiempo se queda tan feliz y tranquila, por lo menos por un período de tiempo. Eso fue lo que me dio la idea. Si a mí me dieran amor cuando me levanto, llego a la oficina, al banco (podrían contratar a alguien para eso), a una reunión, etc., yo sería superfeliz, no tendría problemas con nadie. Entonces quiere decir que un abrazo y un beso no son suficientes. Cuando nos veamos, tenemos que acariciarnos un poco la cabeza, así mutuamente como los monos; nos tiramos en el suelo y descalzos nos arrascarnos la barriga con los pies; nos miramos a los ojos y nos dejamos saber que lo que hay ahí dentro es amor de verdad, del inconsciente, del que no hace falta decirlo a cada rato. Y así, en cada lugar que lleguemos y con cada persona que nos crucemos y conozcamos (porque mi perrita no se va con cualquier loco). Sería el mundo perfecto (bueno haría falta que legalizaran cierta droga y le bajaran un chín al ritmo que vamos, pero sería un buen comienzo). Mientras tanto, Ava seguirá demostrándome que el cariño es algo que se tiene que dar en dosis diarias y frecuentes. Una buena receta para asegurarte fidelidad y un montón de sonrisas.

Esta mañana después de leer el blog de Alex, estuve apunto de escribir algo que más o menos coincidía con esa sensación generalizada de que este día de San Valentín es puro bulto comercial. Y es verdad que lo es. Pero eso no quita que cuando sientes que compartes algo especial con los demás, algo que va más allá de las afinidades o de los intelectos, que tiene que ver con la esencia de las cosas, con la química, con las risas, con la tristeza, con el apoyo, con llenar esos huecos que quedan, sientas que este día es sólo una excusa más para juntarse (para variar) y profesar la suerte que nos ha tocado vivir. Porque si lo piensan bien, somos cuatro gatos que nos encontramos hasta fuera de esta bendita isla, que tenemos todos diferentes edades y estados barriales, hasta diferentes equipos de fútbol, amores, puestos de trabajo, virtudes… Por eso, una buena junta, varias botellas de vino, y mucha, mucha amistad (muy al estilo griego, pero sin las orgías) puede hacerte cambiar de opinión. Sino lo has hecho, pásate esta noche por la Trattoría y dale un nuevo chance al angelito ese, que me ha dicho que te dedique muchas canciones.

A propósito del articuento que publiqué hoy en el Blog les voy a hablar un poco de Juan José Millas. Bueno no mucho, sólo que es un escritor valenciano, periodista, genial, que le gusta mucho estrechar la realidad para hacerla más mágica. No es realismo mágico, es algo muy suyo, es cómo una la ironía que está presente en todo lo que nos rodea elevada a la máxima potencia. El primer libro que leí de él, es uno de mis favoritos. Se llama El Orden Alfabético y lo pueden conseguir en algunas librerías. Se los recomiendo, sobretodo aquellos que quieran una historia que los distraiga pero no sea completamente insulsa. Aprovecho para abrir la puerta a una improvisada blogtertulia literaria, que bueno, consistiría en leer y publicar algún comentario de los libros que más nos gusten para que los demás tengamos acceso a otro tipo de literatura. Así que estaré pendiente de sus blogs a ver si me sigo enriqueciendo de esta maravillosa experiencia.

Postdata: Sabían que el blog si tiene un spellcheck. Sólo tienen que usar el botón derecho del mouse sobre el texto del post que estén escribiendo, y cambiar el idioma a español. Muy bueno. Esto se pone cada vez mejor.

Dado que mis padres se separaron al poco de que yo me independizara, pensé que quizá no lo habían hecho antes para evitarme los sufrimientos que se atribuyen a los hijos de las parejas divorciadas. Pero a mí la idea de que hubieran permanecido unidos sin quererse durante todos aquellos años me quitaba el sueño. "Lo normal es que los hijos se culpen de que los padres se separen, no de que hayan vivido juntos", me dijo un psicólogo, aportando al caso abundante documentación. Pero a mí todo lo normal me parece muy raro, así que no me ayudó gran cosa.
Por las noches me quedaba despierto hasta las tantas, dándole vueltas al asunto, obsesionado con la idea de que los momentos de dicha familiar que guardaba en mi memoria hubieran sido un espejismo. Y es que si aplicaba ahora la lupa a las cenas navideñas de la infancia no me costaba advertir en sus rostros gestos de desesperación. Qué espanto, pensaba, que toda aquella felicidad se convirtiera de súbito, como el día de Reyes, en una mentira. Comencé, pues, a pedirles por teléfono que se reconciliaran, pero ellos decían que no estaban enfadados y que me metiera en mis asuntos. Mamá era más dura. Papá no solía colgarme, pero iba y venía del aparato masticando cosas mientras yo hablaba al vacío.
Entonces pensé que mezclando sus números telefónicos obtendría, lógicamente, el de un abonado que fuera la suma de los dos, y de este modo se mantendrían unidos incluso a su pesar. Así lo hice. Luego llamé al número resultante y salió un sex?shop de Londres. Me pareció raro que se hubieran ido tan lejos, y para dirigir un negocio de esa naturaleza, pero dijeron que se encontraban bien y me invitaron a visitarles para comenzar una nueva vida juntos, esta vez en inglés. Con buena voluntad, todo se arregla.

Juan José Millas - Articuentos 2002 ©

El insomnio, parece algo terrible pero es como una droga. Llevaba días sin dormir y todo lo que hacía era pensar en letras, en sacar de mi cabeza estas ideas que llegaban entrometidas. A falta de trabajo, blog… Esa podría ser una frase muy común en el 2050, usada por los futurpsicólogos como terapia al insomnio y el paro. Entonces andaba montado en una nube con mis tres horas de sueño repartidas, un poco tristón, un poco sonámbulo. El dedo fácil, electrónico y estresado, no dejaba de maravillarse ante la posibilidad de ser escuchado, estaba como poseído y eso no me ayudaba a dormir. Así que desde que se ponía naranja la habitación por la mañana (no por el bonito amanecer, sino por el cubrecama que uso de cortina) me levantaba, me sentaba en el baño y me ponía a escribir, lo que sea, lo que saliera. De veinticinco archivos que salieron, me gustó más o menos uno y entonces fluyó. Una oda a mi estado, un canto a mi mujer subconsciente, una queja, un aviso, un desahogo, una filosofía…
Anoche dormí como un niño, y no veas el trabajo que me ha costado escribir hoy. Estoy como feliz, y eso que lloré por la mañana. Las canciones que escucho tienen otro significado, mis más bellos amigos me hacen sentir especial, pero estoy menos creativo. Quien fue el maldito chino que se inventó el yin y el yan. Pero ese es otro tema. Insomnio curado, que me hace falta y que temo recuperar, y un día de blog más y una prueba más de que a veces lo malo no es tan malo y trae muchas vainas buenas.

Algo giró en la tierra que lo cambió todo. Me dan ganas de estar flotando en el espacio como un satelite y verlo todo desde arriba. Ver esa grieta que quedó en el mar en el epicentro de aquel terremoto que cerró el año y abrio la caja de pandora. Ver como crece la amistad y decrecen las promesas. Como se amontonan las metas y pasa irremediablemente el tiempo. Ver, tener esa capacidad, verlo todo. No se si me de por jugar a ser Dios allá arriba, para cambiar las fechas de muerte y los reglones torcidos. Ver si podemos conservar un poco la inocencia y no ser niños tontos, sino dulces y sensibles adultos que encuentran y siguen encontrando y no se separan de su eje por una simple grieta. Ver los cambios sin que se me hinche el pecho, y se me salgan las entrañas y tenga que tomarme una dramamina para no vomitar más ese drama que causa la mezcla de alcohol y circunstancia. Seguro que para colgarme allá arriba en el espacio, me llevo el Ipod que nunca me he comprado, para seguir viendo con la ayuda de fito y de pedro, de andrés y de jorje… A lo mejor me llevo mi guitarra y mis sueños y una telera grande de pan integral para no morirme de hambre en el espacio. ¡Algún día! Porque el espacio está ahí para algo. Mientras tanto, me va tocar seguir construyendo historias aquí en la tierra y percibir el cambio en medio de este caos de isla que no tiene ni un satelite, ni una misión en el espacio, llena de burbujitas inconexas, llena de ojos doblegados por la monotonía, pero llena de amor del que busca refugio en este y otros blogs, y en la letra y en las cuevas del malecón, esperando siempre nuestro pequeño y particular tsunami.
i.